jueves, 24 de julio de 2014

De historias húmedas


I

Tarde de viernes!!!

Salgo del trabajo una hora mas temprano, los viernes siempre favorecen el horario, claro “si todos tenemos vida social” (me digo sarcástica). Me da emoción el poder llegar al depa. y juguetear con mis gatitas, siempre es la emoción final que me inspira en el día.

Después de caminar un largo tramo por el paradero, evitando al mismo tiempo las voces de los microbuseros y cacharpos  mostrándose machos para ligar a la que pase (mas si ésta lleva vestido corto como es mi caso), llego por fin hastiada a la fila del transporte público que me ha de llevar a mi casa (tan anhelada cada instante más).

Paso por la fila desatendiendo a las personas que la conforman,  me da igual encontrar a alguien conocido o no, este trabajo no me ha sido propicio para hacer amistades entrañables o de intereses comunes al menos (creo que cada vez mis intereses van siendo más raritos).

Al subir al cacharro y percibir emocionada que hay muchos lugares para irse sentada (es incómodo los jalones en este transporte cada que frena la unidad) me logro percatar de una cara muy atractiva a mi parecer, sorprendentemente me atrae un varón, aproximadamente de unos 35 años, cabello castaño claro, piel clara, ojos avellana un poco pequeños, nariz algo delgada, afilada, barba tupida y a tono del cabello que deja entre ver su boca un tanto pequeña, labios delgados, afilados. Él es un tanto grande, a pesar de estar sentado se ve su altura por como sobresale del asiento, es un tanto fornido, nada espectacular, atractivo pues, además que le ayuda un saco sport color caqui combinado con camisa azul claro, muy casual, al estilo de un viernes.

Realmente me parece apetecible su rostro, su barba, su tamaño, no puedo dejar de mirarlo fijamente, me atrae, me seduce el solo verlo. De repente pasan en un instante breve por mi cabeza tantas formas en que podría atarlo a mi cama, a mi cabecera, ¡Cómo llenaría con su enormidad todo ese espacio! Me imagino su rostro gimiendo de dolor, sintiendo mi flogger sobre su cuerpo blanco y peludo, intentando gritar con cada cachetada, intentado suplicar con cada varazo deliciosamente acomodado en sus pies, en sus palmas.

Lo veo atado ahora en forma fetal, mis cuerdas adornando su cuerpo hermoso y grande, el sobre la cama boca abajo pero con el suficiente espacio entre su rostro y la cama para poder poner un espejo frente a él, yo comenzando a besarle la espalda y a fustigarlo, le coloco lentamente una bala vibradora sobre su ano mientras mi vara le recorre lenta dulce y fuerte la espalda, aviento la vara, mis manos llegan a sus nalgas y en cada nalgada el gime, llora, suplica, se menea, mueve todo su culo restregándolo en mi pierna, le complazco quitándole la bala e introduciendo mi dedo en su interior. Esta caliente, arde por mí, le introduzco dos dedos, pide más y más, le muestro mi strapon, llora, su carita hermosa de miedo y deseo me excita, me tiene muy mojada, me froto en su espalda para que sienta mi excitación, y mi humedad crece y se vuelve diluvio y le mojo la espalda un poco, termino de frotarme en sus manos y espalda.

Él va sintiendo mi strapon lentamente y gime y…. Se frena la maldita unidad y me despierto, le sigo viendo fijamente, pero él no se incomoda, al contrario, me hace señas, me quito los audífonos y me preguntas mi nombre, iniciamos una historia...
(07 de marzo de 2014)

II
Juntos con la luz atravesando las persianas, mojando en clarosuro la habitación llena de olores, de sexo y amor lo contemplo, lo acaricio suavemente lo muerdo y lo beso de deseo apaciguado mientras él duerme plácido, moviendo inevitable en ratos el brazo, la pierna, quizá soñando, quizá intentando despertar, quizá en el sueño despierta y hace una vida o vive a punto la muerte, ese espacio en que se me niega su mundo, sólo en ese espacio se me negará.

La espera es hermosa, es tibia y somete la arrogancia al placer que viene cuando despierta y comienza a tocarme entre los vellos entre los labios lento con sus dedos, me siente húmeda, sabe que he estado esperándolo mientras él se fuga en sueños, y ahora que regresa, que entre brazos y piernas nos tenemos me acaricia, me excita dulcemente, me muerde la oreja, le chupo los labios, le beso el rostro el pecho y la humanidad entera que tiene para ser, ser él para mi en este instante largo, eterno y efímero.

Me levanta, me sube y yo me muevo encima como deseando tenerlo por siempre, lentamente, sintiéndolo dentro, sus manos me tocan fuerte me nalguean, me amasan y me clavan más en el momento, su cadera se alza mientras acelero el movimiento, se viene mi fin, el deseado fin, lo mojo, lo empapo y él sonríe satisfecho y me pone boca abajo me alza la cadera, me nalguea y me penetra duro y lento para que lo sienta en su esplendor, insiste e insiste y se repite mi operación, pierde quizá la cuenta de mis buenaventuras.

Mis gritos suben y bajan de tono pero el cuarto nunca esta en silencio, mis cantos mis odas al placer llenan la habitación, el departamento, la calle y el universo. Somos una sola entidad que se sumerge en el principio del placer y no termina.

Entre humedades vivimos el espacio compartido.
(07062014)

III

Adoro mojarme en las tardes lluviosas.

Afuera la lluvia empapa la ciudad de recuerdos,  de ocasiones y excusas.

Adentro Armando Palomas, la memoria, dos felinas y mis manos ayudando a recordarte.

Las tardes lluviosas ayudan a disimularme, camuflaje y la vida va.
(30052014)

IV
Ella lo tiene boca abajo, con un cojín bajo su vientre, casi rozando con su pene, a punto de penetrarlo y él se logra soltar ¡mierda!

Mordaza fuera y grita. Lo escucharon y viene Julio, ve el strapon tirado casi junto a la puerta.
Cuando entra, él la tiene sujeta ahorcándola por el cuello, la está asfixiando pero ella solo logra articular movimientos de su pelvis para aventarla hacia atrás y hacia delante.
(al llegar Julio se encuentra a Alejandro asfixiando a Hanna)
Julio la mira, sabe  bien que debe hacer, lo avienta, le abre las piernas y la penetra.
Ella ha visto casi concluida su obra.
Alejandro al no saber cómo reaccionar solo es capaz de aventar a Julio, levantar con sus brazos  Hanna y penetrarla por el culo mientras ella gime, solo gime y grita de placer, Julio se levanta y la abofetea, sube las piernas de ella alrededor de su cintura y la penetra brutalmente, ambos dentro, sintiéndose a través de su piel, su carne de ella.
Julio toma de nuevo el cuello y Hannah es la más sublime y acuosa mujer sobre la tierra.
(21052014)

V

Él la llama para saludarla, darle las buenas noches y ella se moja al oír su voz.
Él mientras tanto va arriba de un taxi.
Ella lo escucha pacientemente mientras él le cuenta que va a su oficina porque lo han nombrado gerente del proyecto.
Ella bromea y comienza a imaginar el futuro cercano pues no puede verse más allá, no con él.
Él mientras tanto apunta con la otra mano al pasajero del taxi, el chofer es un guiñapo que sólo se dedica a conducir.
Quizás sea el mentor de la idea, quizás no exista nada más excitante que ver como secuestran a  alguien y le apuntan con un arma a la cabeza.
Él no trae cargada el arma pero ella no lo sabe, pues si supiera cómo él goza de su arma en aquel instante íntimo, ella sería la mujer más húmeda del mundo.
(19042014)

VI
Cierra muerte

Tal vez no la habíamos visto y ya llevaba mucho tiempo ahí, y tal vez quería suicidarse pero no podía y se puso allí para que alguien más lo hiciera por ella, hasta que yo llegué y la aplasté.

Seguro que caminó porque ya se había arrepentido…
                                                                                                      Muy tarde pequeña palomilla.


Yorokobi Leo Artivista (Karla Alegría Martínez Roa)

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